Silenciosamente, sin responder a quienes me acusaron de partidista y hasta de cobarde, seguiré esperando los primeros 100 días de la nueva administración. Lo prometí y lo cumpliré.
Cumpliré porque no quise, ni quiero confundir la euforia del triunfo con la arrogancia y la desfatachez de politicuchos sin agendas.
Cien días. Ni uno más.
Pronto me uniré, en favor del pueblo, a aquellos que denuncian, reclaman y demandan soluciones a los problemas que afectan nuestra sociedad.
Pronto volveré a hablar de:
Abuso de poder
Adecentamiento del Estado
Basura
Constitución
Corrupción
Criminales de corbatas
De la esclavitud
Delincuencia infantil
Delincuencia policial
Deporte escolar
Deuda externa
Disolución del Congreso
Distribución de los bienes nacionales
Divisa
Educación
Energía
Enjuiciamiento de los corruptos
Evasión de impuestos
Esclavitud
Función del Ejercito Nacional
Haití y RD
Inmigración
La canasta familiar
Nómina del estado
Nuevos Millonarios
Obras mal construidas
Oportunidad para los pobres
Orlando Martínez, Goyito y Narcisazo
Presupuesto
Poder Judicial
Problema del transito
Prostitución infantil
Recuperación y mantenimiento de los terrenos del estado
Relación con Cuba
Remesas
Soberanía Nacional
Sueldo mínimo
Trafico de influencia
Traidores económicos y políticos
Turismo peligroso
Y Zona Franca, entre otros.
Felipe Lora
felipe@lora.org
14 de noviembre, 2004