Con renovada ilusión
A mi puerta yo me asomo
Día a día a ver como
Me defrauda el corazón.
Siempre tengo la impresión
De que hoy será el día
Que entrará la alegría,
Esa alegría anhelada,
Pero quedo defraudada
Al oír gritar la cría.
Su grito me hace pensar
En la cruda realidad
Y aunque acostumbrada ya
Siempre me pongo a llorar.
Pienso en lo que va a pasar
Mañana cuando ella crezca
Y al igual que yo envejezca
Esperando día a día
En la puerta a la alegría
Sin que ésta aparezca.
El Loro Dominicano
18 de Octubre, 2003